
Málaga en la Historia
Más de tres mil años de historia contemplan la ciudad de Málaga. Desde sus orígenes fenicios, es precisamente el paso por su suelo de numerosas y variadas culturas lo que ha convertido a Málaga en ese destino atractivo y cosmopolita que es hoy.
El Teatro Romano o las piletas de garum nos remitirán a los tiempos de la Hispania Romana; la Alcazaba es el ejemplo vivo más bello de la etapa musulmana de Málaga. El Santuario de la Victoria marca el sitio desde donde los Reyes Católicos cercaron la ciudad en 1487. El Palacio de Buenavista nos habla de la nobleza que se instaló en la ciudad durante el Renacimiento. El esplendor barroco se palpa en las recargadas bóvedas barrocas construidas sobre las techumbres mudéjares de iglesias como San Juan, los Santos Mártires o Santiago…
A través del Museo del Vino podremos descubrir la importancia de la uva en la prosperidad de la ciudad hasta la plaga de la filoxera. Los altos hornos de la zona oeste nos hablan de la ciudad industrial de referencia en que Málaga llegó a convertirse en torno a la segunda mitad del XIX. También nos habla de esta época y la burguesía instalada en la ciudad la señorial Alameda y la calle Marqués de Larios.
Málaga ha crecido significativamente desde la mitad del siglo XX hasta nuestros días, a pesar de la escisión de Torremolinos, que pasó a ser municipio independiente en 1988. Toda su extensión cuenta la historia de la ciudad, una ciudad con un riquísimo legado que sigue mirando al futuro.