
San Ciriaco y Santa Paula
Ciriaco y Paula fueron dos jóvenes cristianos malagueños martirizados el 18 de junio del año 303, en el marco de una persecución dictada por Diocleciano. El lugar del sacrificio fue lo que actualmente se conoce como Martiricos, que alude directamente a estos jóvenes.
En 1487, con la llegada de los Reyes Católicos a la ciudad, los Santos Mártires Ciriaco y Paula son nombrados patronos de la ciudad de Málaga y se dedica a ambos una de las cuatro primeras parroquias en su honor. Desde 1582 y hasta finales del siglo XX, el 18 de junio ha sido jornada festiva en Málaga.
Las actuales imágenes de los Patronos presiden el altar mayor de la parroquia de los Santos Mártires Ciriaco y Paula y son obras de 1645 del escultor Jerónimo Gómez Hermosilla. Proceden de la Catedral, ya que los iconos originales del templo desaparecieron en los asaltos de los años treinta.
Una Congregación dedica cultos y fiestas en honor de los dos santos durante todo el año, incluyendo una solemne procesión en las cercanías de su festividad. Además, la Diócesis de Málaga celebra su día con grado de solemnidad, contando con una misa propia que se celebra cada 18 de junio.